Por Fernando Garrido | Eran exactamente las 22 hs cuando tome la costera, el 338, en Camino de Cintura y Venezuela luego de ir a visitar a ...
Por Fernando Garrido | Eran exactamente las 22 hs cuando tome la costera, el 338, en Camino de Cintura y Venezuela luego de ir a visitar a una amiga que hacia muchos años no veía. A esa hora por suerte no viene tan lleno, había asiento para elegir así que me senté del lado derecho junto a la ventana, casi a la mitad. Había leído historias que sucedían arriba de estos medios de transporte, y he visto videos de algunos que con mucho coraje filman bultos o apoyadas en horas pico cuando el vehículo viene tan lleno que pareces sardina enlatada.
Tiene como su lado erótico por así decirlo ya que la luz esta apagada y solo se veían las luces de la parte donde va el conductor dando onda a una especie de reservado ambulante, mientras se oía la música santafecina, con Los leales, Leo Matioli...etc. que venia escuchando el chófer, yo observaba con carpa a mi alrededor, la mayoría eran hombres. Nunca me había pasado nada en un colectivo, menos en estos que parecen micros de larga distancia, hasta que en Morón suben varias personas y yo relojeando, de pronto llega un chico con mochila y de anteojos, me llamo la atención como dejaba ver el borde de su bóxer por arriba del pantalón de jeans gris y tenia un suéter color negro.
El me miro y se dio cuenta de que prácticamente le había sacado la radiografía, entonces se sentó a mi lado, cruzamos unas miradas y hubo una leve sonrisa de ambos dando a entender de que estaba todo bien. Se puso la mochila sobre sus piernas al igual que la campera , tomo su celular , lo encendió y comenzó a escribir dejando que yo pudiera leer lo que decía "te puedo hacer una paja"...primero me dio gracia, pero a la vez me puso a full, sentí que mi sangre empezaba a hervir...entonces con mi mano rose su pierna y la acaricie asintiendo en su propuesta , a lo que el no perdió tiempo y de inmediato llevo su mano a mi entrepierna haciendo que mi verga latiera a mil y empezara a endurecerse. Yo tenia puesto un pantalón chupín de jeans y una campera negra con la cual estire hacia abajo para tapar la mano del visitante, la adrenalina que sentí y la excitación me invadió por completo mas cuando empezó a desabrochar la cremallera a botones , un poco mas complicada. En un momento estire mi mano a su bulto y note que estaba tan o mas excitado que yo... de todas maneras estaba atento a nuestro alrededor , el colectivo a media luz y en movimiento...no me sentía nervioso, de hecho si lo hubiese estado no se me habría parado de tal manera a punto de estallar. El chico metió la mano bajo mi bóxer y tomo mi pija para masturbarla, reconozco que me encantaba lo que estaba sucediendo mientras seguía sonando la música santafesina. El me pregunto si había hecho esto antes y la verdad, respondí que no, nunca me había pasado, cosa que a él si, ya había experimentado en la costera.
Le pregunté hasta donde iba y me dijo que bajaba en Hurlingham y tomaba el tren porque vivía en Tropezón, le dije que si había algún lugar por ahí podríamos seguirla, que a mi me quedaba bien también tomar el tren Urquiza hasta Podestá , a cinco minutos de ahí, el resto del viaje en la costera siguió a pura paja , en un momento saco mi pija para pajearla mejor, ufff... estaba a full pero estirando mi campera para tapar lo acelerado que movía su mano hasta que llegamos a Hurlingham.
Bajamos juntos entonces y fuimos hasta el anden que va hacia Lacroze, fuimos hasta la otra punta, yo oriné porque me estaba meando y volví a él. Pude saber en la charla que tenía 28 años y que estaba casado hacia 6 años. Era gay pero no lo aparentaba, fachero y actitud muy masculina. Una vez ahí en el andén empezaron los manoseos, el desabrochó su pantalón y OH, la sorpresa fue ver su hermosa verga gruesa y larga que caía hacia un costado. Me pregunto si me gustaba y aunque antes me dijo que era versátil, preferentemente era mas activo, y se notaba en su actitud a pesar de haberme pedido de hacerme una paja en el colectivo. De repente nos fundimos en un beso hasta comernos la boca hasta el fondo....mi mano yacía dentro de su pantalón, le pedí como ubicarlo pero sus horarios eran estrictos con respecto a su pareja así que ni siquiera me dio su numero, debí conformarme con que siempre pasaba por allí a esa misma hora. Luego de unos manoseos y de morirme de ganas e chuparle la pija y que el hiciera lo mismo, llego el tren, yo bajaba en dos estaciones cosa que demoraba 5 minutos, tiempo suficiente para meternos en el furgón, que estaba vacío y en un espacio en la unión de los vagones pude saciar, una forma de decir, de llevarme un poco su pija a mi boca con el tren en movimiento...todo fue muy fugaz porque tuve que bajar enseguida y el seguía tres estaciones mas , nos despedimos con unos besos...una pena no tener un contacto ya que me dijo que le había gustado luego de acariciar mi piel bajo mi camisa y decirme que la edad era lo de menos porque le gustaba.