Por Mr. Brightside | La suerte estuvo de mi lado. Todos saben que esta tetera es un poco complicada, y no hay que dejarse llevar por el pe...
Por Mr. Brightside | La suerte estuvo de mi lado. Todos saben que esta tetera es un poco complicada, y no hay que dejarse llevar por el pesimismo de los otros. Acá leo muchas veces que a donde a uno le fue muy bien a otros no les pasa nada. Les cuento mi experiencia.
Fui hace un par de sábados al Jumbo de Tronador, y le comí la pija a un madurito bien puesto, pero como nos interrumpieron no pude cumplir mi objetivo (que me de la leche). Cosa que volví, mas o menos a la misma hora que la otra vez, pero mas que nada porque fue a la hora en que me desocupé, mas que porque sea un horario en el que haya levante seguro.
Al entrar no había nadie. me propuse quedarme hasta el final de la canción que estaba escuchando (que apenas había llegado al primer estribillo en ese momento) y los planetas se alinearon ya quedaban apenas segundos para que guarde la chota y suba a comprar que escuché pasos. Y quien apareció?
“No, ahí viene la leche, seguí!”. Para que! Me prendí con mas ganas que antes. Me descargo tremendos lechazos, acompañados con melodiosos gemidos cada uno de ellos.
Subí a comprar con toda la felicidad del mundo, el no se donde se metió.
Fui hace un par de sábados al Jumbo de Tronador, y le comí la pija a un madurito bien puesto, pero como nos interrumpieron no pude cumplir mi objetivo (que me de la leche). Cosa que volví, mas o menos a la misma hora que la otra vez, pero mas que nada porque fue a la hora en que me desocupé, mas que porque sea un horario en el que haya levante seguro.
Al entrar no había nadie. me propuse quedarme hasta el final de la canción que estaba escuchando (que apenas había llegado al primer estribillo en ese momento) y los planetas se alinearon ya quedaban apenas segundos para que guarde la chota y suba a comprar que escuché pasos. Y quien apareció?
EL MADURO DEL OTRO SÁBADO!
Me vio, y se le dibujo la sonrisa en la cara. De una pelo chota y se fue endureciendo en mi garganta. Lo mame con todas las ganas. Esta vez no me iba a ir hasta que no me de mi premio. ya estábamos a full, y el tipo me dice “ahí viene”. yo pensé que me decía q venia alguien y me pare enseguida.
“No, ahí viene la leche, seguí!”. Para que! Me prendí con mas ganas que antes. Me descargo tremendos lechazos, acompañados con melodiosos gemidos cada uno de ellos.
Subí a comprar con toda la felicidad del mundo, el no se donde se metió.
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