Por Marcelo - Hola amigos esto me ocurrió el sábado 19 de Septiembre a las 22 hs. Horario acordado con un flaco que me contactó a trav...
Por Marcelo - Hola amigos esto me ocurrió el sábado 19 de Septiembre a las
22 hs. Horario acordado con un flaco que me contactó a través de
esta página, en la estación de Glew a las 22hs quedamos en encontrarnos, asà sucedió llegue a la estación y me estaba esperando, era un
tipo bien alto 1,75cm, cabello negro, barbita de dos dÃas, robusto,
bien fachero me gustó lo que vi ya que era tal cual el se describió, de ahà nos
fuimos a su casa que quedaba a pocas cuadras de la estación , mientras caminábamos
Ãbamos hablando de varios temas ,me contó de el y yo de mis cosas y
entre anécdotas nos reÃamos de nuestras experiencias y de cosas que
nos habÃan sucedido.
Llegamos a su casa, entramos
cerro la puerta no pudimos esperar , comenzamos besarnos de manera voraz, ambos labios se unieron con fervor uno con el otro, nuestros cuerpos ardÃan
de pasión parecÃan consumidos por las llama de la lujuria, ese
fuego , ese candor, ese éxtasis contenido salio disparado hacia afuera causado por la frotación de nuestros cuerpos candente, seguÃamos besándonos
apasionadamente y sin dejar de hacerlo nos despojamos de nuestras ropas, dejándolas
caer al suelo sin importar donde terminarÃan, nuestros cuerpos ardientes se
reposaron sutilmente sobre un sofá que estaba en el comedor, entre franeleo,
besos y caricias...
El ambiente parecÃa perfumarse con los aromas del sexo
que daba cierto aire de romanticismo y de lujuria desenfrenada, empecé
a chuparle la pija que media 20×6 y un par de huevos enormes que
pegaban en mi rostro con cada movimiento de pelvis que hacia cuando yo se
la estaba chupando, mi lengua se deslizaba por pija como si se tratara
de helado, chupe sus huevos de a uno luego me mande los dos juntos a mi boca
estaba totalmente excitado y esos huevos estaban súper cargado de leche que yo
estaba dispuesto a extraer hasta la ultima gota de ese tan codiciado elixir de
los dioses, luego comenzó a dilatar mi culo con sus dedos, en instantes
me pidió que me diera vueltas que querÃa cogerme , asà lo hice me puse en
cuatro y comenzó a meter su pija en mi orto, despacio con suavidad y delicadeza yo gemÃa y apretaba mis dientes, sujetaba con fuerzas un almohadón.
SentÃa
un dolor inmenso cuando entraba su pija en mi culo una vez dentro el dolor
se transformo en placer, y comenzó a bombear despacio primero y luego con
mucha fuerza su respiración y jadeos eran cada ves mas intensos parecÃa ir junto
con el movimiento pélvico de la envestida que me estaba dando, yo gemÃa,
gritaba de placer, el placer de estar recibiendo la pija de un macho que
me gustaba, sus huevos pegaban sobre mis nalgas ese ruido o ese efecto
provocaba mayor excitación en mi, ya estaba por acabar de pronto siento que vertÃa
en mi culo todo ese jugo candente contenido dentro de esos huevos.
Terminó y se
quedo un rato sobre mi, después retiro su pija todavÃa erecto de mi culo, entre
al baño me di una ducha me vestÃ, le di un beso y me fui contento y feliz a
tomar el tren de vuelta a mi casa.