Por Martin Brightside - Hace un par de semanas me fui a pegar una vuelta por la Reserva. Hacia ya bastante tiempo no iba. Me habÃan c...
Por Martin Brightside - Hace un par de semanas me fui a pegar una vuelta por la
Reserva. Hacia ya bastante tiempo no iba. Me habÃan comentado que los
cuidadores estaban más heavy que nunca y que de hecho ya era muy común que se
metan en los senderos internos a "cazar putos". Pero el dÃa estaba
bastante caluroso, estaba de dÃa libre en el laburo, axial que me fui a ver si
enganchaba algún oficinista de Puerto Madero en su hora de almuerzo como ya me
pasó alguna vez.
El primer impacto "negativo" fue ver que,
efectivamente, quienes se encargan del mantenimiento de la Reserva ya están
decididos a impedir los garches en los bosques internos: los accesos estaban
todos tapados o con alambrados, o con montones de ramas secas, cuando no con
ambas cosas a la vez. Acompañados de un poste con un cartel indicando
"PROHIBIDO BAJAR DE LOS SENDEROS" o algo asÃ... no van a creer lo que me pasó...
Yo me imaginé que el puto a la hora de comer pija es
bastante porfiado, y seguro algún otro camino/recoveco interno habrá encontrado/creado,
asà que seguà caminando por la zona que se sabe que es de yire, a ver si
encontraba alguna pista (o alguna pija, ja).
No paso mucho tiempo que pasó un pibe en bici. Miradas tÃpicas.
Era obvio que estaba de yire. De hecho, al poco tiempo de pasarme, pego la
vuelta y se me acerco. TenÃamos ganas los 2, pero le decÃa que no sabÃa donde podÃamos
ir, que los lugares que yo conocÃa estaban todos tapiados, y más para entrar
con la bici se complicaba bastante. Me propone ir por el camino mas cercano a
la ex Ciudad Deportiva, agarrando algún que otro atajo entre los caminos.
Agarramos el primer atajo, y resulto no ser tal, sino un camino que terminaba
en un recoveco, oculto del resto de los caminos! Ahà nomás peló una pija larga
y gorda, que me agache a mamar enseguida. Empezó gomosa, pero enseguida se puso
durÃsima!
El flaco se volvió loco cuando vio que me la comÃa hasta los huevos, y me empezó a garchar la garganta con ganas. No me soltaba la nuca! Igual el estaba muy caliente y cortaba seguido.
Me pidió el orto, que no dude un segundo en entregárselo. Le di un forro y le pedà que vaya despacio, que del grosor que tenÃa podÃa doler si la mandaba muy de golpe. No se si el chabón era muy experto rompiendo ojetes, o yo estaba muy abierto y mojado de la calentura, pero casi de una me la mando toda, y me empezó a serruchar agarrado de mis hombros. Lamentablemente no duro mucho, pero si note que el forro lo dejo bastante lleno. Nos acomodamos y seguimos cada uno por su lado.
Era evidente que habÃa más de uno buscando acción por ahÃ,
pero ninguno terminaba de concretar, quedaba todo en las miradas y las
insinuadas. Después de llegar a la "playita", empecé a pegar la
vuelta. Ya un par de senderos antes de la salida, me cruzo con un pibe, que se
manotea la chota apenas me ve. Obvio que agarre viaje. Me pregunta que me va.
Charlamos un poco de que podÃamos hacer, y se mete como yendo para la
"costa", en medio de los matorrales. Nos acomodamos entre los
arbustos y pela chota. Se la empiezo a mamar, y me tira "tenes un 50 o un
100 para tirarme por chuparme la pija?". Corte el pete inmediatamente. Eso
nunca me lo aclaro, y yo nunca en la vida pague por sexo. Mucho menos por ese
flaco que no valÃa ni 2, que lo estaba pateando por la calentura y el morbo de
la situación nomás. Me levante y me fui, mientras el flaco se levantaba los
lompas al grito de "nooo para, veni! no te vayas!"...
Unos metros mas adelante, me cruzo un maduro. Misma situación
de siempre: se manotea la chota, marca un buen pedazo muerto abajo del jogging.
Al mismo tiempo pasaron un par de pibes más facheros, en obvia actitud de yire.
Intente levantarme alguno pero no tuve éxito. Mientras, el tipo que marcaba
chota se metió adentro de los senderos, en un sector donde habÃa un linyera
ranchando en "la entrada". Me lo encuentro al maduro. Ya estaba con
la chota afuera. Muy bien equipado. Se la empiezo a mamar y el tipo se vuelve
loco. Me da vuelta enseguida y me empieza a dedear. Cuando nota que ya venia
abierto, me la quiere mandar de una, pero lo freno y le doy un forro. Se lo
pone, me la manda.... Yo pensé que como habÃa arrancado con la pija de cero
desde afuera iba a tener un buen aguante... Pero no pasaron ni 30 segundos que
el tipo empieza a gemir con ganas y a empijarme con estocadas firmes... Estaba
acabando. De nuevo, a acomodarnos, a levantar las "pruebas del
delito" y emprender la retirada.
Ya cerca de agarrar el ultimo sendero, me cruzo otro flaco,
alto, buen fÃsico armado, medio croto pero bien de jeta. Se manotea el bulto y
se manda para adentro de los bosquecitos. Me mando atrás de el. Me estaba
esperando con una hermosa, larga y venosa chota en mano, ya a pleno de parada.
Se la empiezo a mamar de una. "Tirame un 100, lo que tengas y soy capaz de
todo, de darte la leche, de culearte, de chuparte la pija, de todo".... De
nuevo, me pidió guita y corte el pete de una, me levante y me fui. También este
apenas me levante me empezó a llamar a los gritos que no me vaya, que siga, que
no pasaba nada, que no le de nada si no querÃa... Pero no, ya el pedido me saco
de onda.
Me volvà a casa sin largar leche, con 2 cogidas cortisimas y
con 2 petes frustrados por pseudo taxiboys devaluadÃsimos que esperaron a pedir
guita con la chota ya en la boca. Cero códigos eso!
Definitivamente, la Reserva ya no es lo que era.