Según pasan los años...

[caption id="attachment_6855" align="alignright" width="400"] Disfrutaba demasiado de nuestros besos que no m...

[caption id="attachment_6855" align="alignright" width="400"] Disfrutaba demasiado de nuestros besos que no me hacía falta más, hasta dormíamos cucharita y para mí eso era la gloria, al otro día desayunar juntos e irme a casa muy chocho.[/caption]

Hace 5 que me fui de casa, me vine a estudiar, estoy en una ciudad más grande, donde pasan más cosas, donde hay lugar para tener miles de experiencias. A mis 23 años, que cumplí hace 15 días, hago un retroceso y me doy cuenta que en estos últimos tiempos hice muchas cosas, tuve mis experiencias. Más allá de conocer gente, de viajar y de avanzar en la facu, me voy a centrar en experiencias íntimas. Empezando por mi primera salida a un boliche gay, me acuerdo que me llevó un amigo diciéndome: “Vamos a un lugar alternativo”, me sonaba raro pero sabía que la iba a pasar bien. Fue muy loco encontrar gente de toda edad, todos con el mismo gusto compartido, gays por todos lados, a mis 19 años me alegró esa situación.

De ahí a levantar, ¿es real lo que me está pasando?, de ver siempre a los heteros levantándose minitas en boliches comunes, a ver ahora como estaba agarrado de la mano de Alan, me reía de la emoción, era un nene yo. Nos comimos la boca al punto de estar sangrando (en parte porque yo tenía brackets) y por la euforia con la que lo agarraba. Fuimos a su casa y lo visitaba de vez en cuando, tranquilamente un amigarche, pero teníamos chape, franela, pete y eso era todo.

Me acuerdo que llegué a “enamorarme” jajaja, es hermoso él: casi de mi altura, pelito ondulado, siempre afeitadito, blanco, buena contextura y por lo tanto un culito hermoso, bien redondito, lindos pectorales. Creo que no hubo penetración porque él esperaba a que yo active y para mí era todo nuevo, yo tampoco tenía iniciativa. Disfrutaba demasiado de nuestros besos que no me hacía falta más, hasta dormíamos cucharita y para mí eso era la gloria, al otro día desayunar juntos e irme a casa muy chocho. Me acuerdo que un día me lo cruce por la calle, nos miramos, lo salude y el muy puto no me saludó, solo me sonrió. Me quede helado sin entender, pero lo incorporé y después le hice lo mismo a Nicolás.

Una noche en otro boliche, entre toda la gente un pendejo, me encanto desde el primer momento, lo miraba, me miraba, no pasó nada esa noche. Al poco tiempo me clave viendo las ultimas fotos que subían a su fanpage, lo encontré, lo agregue y empezamos a hablar, para mi sorpresa me dijo de vernos, rápido Nicolás. Quedamos, lo fui a buscar, nos gustamos, vinimos a mi casa, peli de intro y de un momento a otro a los chapes. Era el segundo pibe con el que tenía algo, la primera noche fue rara, entre que no lo conocía tanto, y entre que iba descubriendo mis gustos en la cama sucedió todo rápido, lo hice dormir en otra cama, muy mal yo. La segunda vez fue mejor y la tercera excelente, al punto de acabar los dos a la vez! Fue hermoso, y la cucharita un sueño, él se durmió al toque y yo lo miraba, lo contemplaba, lo disfrutaba. Le tocaba la naricita linda que tiene, le recorría los labios con mi dedo, le acariciaba el pelo. Y creo que me “enamore” nuevamente. Un día me lo cruce en la calle, de imbécil que soy repetí aquella situación con Alan, pero esta vez el muy puto era yo. Pensé que de esa manera marcaba una distancia, pero ¿una distancia necesaria? Con el tiempo seguimos hablando pero ya no nos vimos más, a veces le tiro la idea pero me dice que está muy ocupado con sus cosas y que tiene que ordenar su vida.

Hasta ahí lo “tradicional”. Después me descargue grindr y conocí los cines condicionados. Además me hice mucho más frio, porque si no sufro cuando estoy solo en casa. Tuve sexo hasta acabar con personas que no conocía, ni el nombre, sin ninguna película como excusa para empezar todo, sin chape, sin cucharita. Y todo cada vez se hace más fácil, o más vacío, o mas irreal. Me sucede que cuando decido ir a alguna sala xxx, me mentalizo en que todo lo que esté viviendo mientras tanto es algo paralelo, puedo petear, penetrar, gemir, ser una puta por unas horas, pero cuando vuelvo a casa, me acuesto y duermo, me despierto y todo me parece un sueño, y por eso me quedo más tranquilo.

La sexualidad, cada vez más presente y más latente. El otro día estando en casa y con mi vieja y hermanas a metros mío, yo leyendo este blog con cuidado y rápido para poder cerrar las ventanas y volver a lo de siempre. Ya sé lo que es tener sexo, que me gusta más ser pasivo, que tengo aguante, que disfruto mucho estando con otro hombre.

Pero lo que no sé es que va a ser de mí, pero queda poco por recibirme, por ahora quiero enfocarme en eso, o al menos eso es lo que intento. No sé de qué manera estarán presentes los hombres en mi vida, pero de a poco me estoy agotando de encontrarlos en lugares oscuros o en fotos sin remera, de no conocer sus nombres o de mirarnos a los ojos, de tener un beso que dure un par de minutos e ir sacándonos la ropa de a poco, lo que más anhelo es la cuchara :D pero encontrar alguien que pretenda lo mismo o que se dé así solo, que surja, hasta ahora se hace difícil.

Creo que ya llegue a los 10 chicos, pero ¿me canse?, ¿quiero pasar a otra etapa?, ¿o simplemente me cuestiono cosas que otros también se plantean? No sé si a alguno de ustedes le pasa lo mismo. Mis pensamientos me fueron llevando a este punto, y aquí estoy. En parte feliz por todo lo que tengo y por lo que soy, pero este temita de mis elecciones en cuanto a la homosexualidad lo tengo ahí, pendiente.

A veces me propongo que todo me chupe un huevo y lo logro, pero ocasionalmente me pongo reflexivo, espero sus puntos de vista. Saludos.

 

Gaby