Salido del mausoleo: mi experiencia en Chacarita.

Como trabajo cerca del lugar, y sabiendo por este blog y otros lugares que es una tetera conocida, hace unas semanas que estaba libre al m...

Como trabajo cerca del lugar, y sabiendo por este blog y otros lugares que es una tetera conocida, hace unas semanas que estaba libre al mediodía, me decidí a darle una chance y hacer un poco de reconocimiento del terreno.

Hice lo que la mayoría indicaba acá, el recorrido de los baños. Primero fui al baño que esta ingresando a la derecha. Todo muy nuevo, muy limpio, pero nada de nada. Me quede un rato a esperar, en un momento entro un obrero a mear pero hizo lo suyo y se fue bien rápido. Una desilusión.

Con mis ganas de pija me fui hasta la capilla a buscar el baño del que tanto hablan acá, y la mala noticia es: ¡esta en obra!

Sin rendirme seguí caminando para ir hasta el Incinerador y los baños cerca de ese lugar. Esta bastante adentro del Cementerio y se tiene que caminar bastante. Aproveche para investigar un poco las galerías donde hay cuidadores pero todos eran viejos, por lo menos los que me cruce.

Me costo encontrar el famoso baño, no esta al lado del incinerador sino que hacía la izquierda un poco alejado. No había nadie, y esta hecho mierda. Puede ser que el horario no acompañara la situación, pero me fui nuevamente para la entrada del Cementerio totalmente frustrado y con un hambre de verga terrible.

Caminando por una de las callejuelas aledañas a la principal, la que desemboca en los baños de adelante para ser exactos, paso caminando por la puerta de un mausoleo y desde adentro me mira un treintañero morocho, no muy lindo, que estaba sentado y presto atención enseguida a que alguien pasaba.

Seguí caminando y a los pocos pasos me doy cuenta que salió hasta la puerta del mausoleo y me saluda con un gesto de la cabeza. En ese momento se me cruzaron un par de comentarios que leí por la web diciendo que a veces los cuidadores no tienen drama de dar pija si se los insinúas. Sin nada para perder volví caminando hasta donde estaba el flaco que volvió a entrar a su puesto de trabajo.

Cuando me vio entrar se paro y me pregunto si necesitaba algo. Inocentemente le pregunte si sabía donde quedaba algún baño y automáticamente se manoteo el ganso.

"¿Buscas algo en especial?" - Y se vuelve a frotar el bulto.

"Ando con ganas de chupar algo" - Mi cara de sediento de leche debía ser terrible porque enseguida me contesto "Con las ganas que tengo de que me chupen la pija"

Ahí nomas me dijo si tenía algo para darle. Le tire 20 pesos y me dijo que espere un minuto. Se acerco a la puerta, la entorno (era vidriada) y me hizo bajar unas escaleritas.

Ahí nomas pelo una poronga morocha hermosa, bastante ancha y de tamaño importante, cabezona sobre todo. La devore con unas ganas terribles. Me cogió bien duro la garganta y me pregunto si le entregaba el culito. Como no tenía ya tanto tiempo le dije que la próxima. Me siguió dando bien fuerte por la boca hasta que acabo toda la leche espesa en mi buche, mientras yo acababa pajeándome en la mano.

Nos limpiamos, subió, me hizo una seña, me despidió y me dijo "Pasa cuando quieras a saludar".

La verdad NUNCA me paso algo tan caliente. Pienso ahora y me vuelvo a calentar. Es mas, la semana pasada volví a pasar tipo 14 hs. y no estaba, me quede con tremenda calentura. Se el nombre del cuidador pero no lo voy a quemar, creo que si son vivos mas de uno lo va a ubicar paseando por ahí, como me paso a mí.

Besos a todas las porongas lecheras que escriben!


Lisandro